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La navidad pasada tuve un extraño sueño. En su tradicional mensaje a la nación el monarca afirmaba dejar paso a la Tercera República a cambio del sacrificio de treinta vírgenes vestales. El vil populacho se lanzaba a las calles profiriendo algo a gritos, algo relacionado con el sexo y con los animales de dos y cuatro patas. Me parece recordar que lo de la Tercera República se quedaba en agua de borrajas.


Herrera y Luzzatti
miércoles, 31 de octubre de 2007a las




¿Quién quiere verse en la calle viviendo de la caridad ajena? Nadie. Por eso yo guardo un rinconcito en el Banco de Santander, por si vienen mal dadas. Por si estalla una guerra nuclear poder comprarme un clarinete de segunda mano y alegrar los corazones de los radioactivos supervivientes. ¿Qué pasa? Es muy posible que la música tenga propiedades afrodisíacas. Y si algo va a faltar es mano de obra joven y barata que recomponga lo descompuesto.


Herrera y Luzzatti
martes, 30 de octubre de 2007a las




Sería hermoso decir que mi mujer fue el fruto del amor entre la sensual trapecista y el hombre forzudo del Circo Mundial, pero eso sería mentir. Es cierto que su padre había trabajado como gerente de un pequeño circo del sur de Francia, y que mi suegra cocinaba en un teatro de variedades del Paral·lel de Barcelona. Pero de eso a hablar de un romance en el seno del mundo de la farándula hay mucho trecho. Y eso es lo que le digo a mi Dolors cada vez que me saca el temita de marras.


Herrera y Luzzatti
lunes, 29 de octubre de 2007a las




En el aparato de televisión flotan algunas modelos anoréxicas sobre una pasarela iluminada. Ninguna sonríe. Una blanca sin tetas recuerda una escoba vieja. Una negra irritada también recuerda una escoba vieja.


Herrera y Luzzatti
viernes, 26 de octubre de 2007a las




Por fin entraron los cacos en casa. Con nocturnidad, con alevosía y con el tacto suficiente de intentar no despertarnos. Pero tengo el sueño ligero y al verlos tan atareados metiendo mis cosas en su saco de arpillera decidí preparar café y sacar algunos dulces. Son amigos de lo ajeno, pero amigos al fin y al cabo ¿no?


Herrera y Luzzatti
lunes, 22 de octubre de 2007a las




Solía mofarme de los que se sientan a mirar hasta que descubrí que sentarse a mirar es todo un arte. Arte en el que la técnica está al servicio del sentimiento. Mira como corre el niño con el globo, mira como tropieza y se deja los dientes en el asfalto, mira como se levanta y sigue corriendo. Mira como el padre lo agarra y le zumba el culo hasta que la pequeña bestia saca el alma por la boca. Mira como llega la madre con los brazos en alto y el grito en el cielo. Mira a ver como acaba la comedia italiana.


Herrera y Luzzatti
viernes, 19 de octubre de 2007a las




Es en las tardes de invierno cuando suelo pensar en dios. Recojo mis cosas y cierro el negocio, hago la caja, me siento en la mesa de mi despachito, abro una botella de Coca-Cola, cruzo las manos sobre mi vientre y pienso en dios. No mucho, la verdad, porque es un tema que me aburre sobremanera, pero sí lo justo para quedarme amodorrado. Todavía no he llegado a ninguna conclusión sobre el tema en cuestión pero, tal como le dije a mi mujer, cuando sepa algo te aviso.


Herrera y Luzzatti
jueves, 18 de octubre de 2007a las




Amparito Campoamor fue una cantante mexicana de origen cubano que tenía una pierna de madera y una voz profunda como una galería minera. Cantaba unos boleros muy tristes y unas rancheras que no había por donde cogerlas (no era su estilo). Ya nadie se acuerda de ella, es normal, pero mi mujer y yo sí. Cuando la oíamos en la radio cantábamos a trío: Aquellos ohos verdeees, de mirada serenaaa...
Amparito se cortó las venas el martes pasado en un hotel de Mexicali, harta ya de tanta tontería.


Herrera y Luzzatti
miércoles, 17 de octubre de 2007a las




¿Conoce usted algún ente ectoplasmático? En el barrio de Gràcia existen varios, pero el más afamado es el Juanma. El Juanma, además de disfrutar del don de la incorporeidad, realiza paranormales proezas tal como la transportación de dinero en efectivo de tu bolsillo al suyo. Y de nada sirve agarrarlo de la pechera y sacudirlo y sermonearle diciéndole que el dinero te cuesta mucho de ganar, y que si quiere dinero que madrugue y trabaje. De nada sirve porque cuando te has dado cuenta, y como si de una viñeta de Mortadelo y Filemón se tratara, te das cuenta de que estás hablando con una berenjena. Y el Juanma ya está lejos, muy lejos. En Estambul, o más lejos quizás.


Herrera y Luzzatti
martes, 16 de octubre de 2007a las




Y si no se hubiese roto el cuello al caer por las escaleras del gallinero, tal día como hoy mi abuela hubiera cumplido 127 años. La recuerdo en el patio de su casa, en Vallirana, apoyada en una morera y escupiendo huesos de cereza al jardín del vecino. Se me quedaba mirando fijamente durante varios minutos y acababa diciendo: “hay que ver lo listo que es este chico, sólo le falta hablar latín”. Claro que también se quedaba mirando a su gato y también decía eso de: “hay que ver lo listo que es este gato, sólo le falta hablar latín”.


Herrera y Luzzatti
lunes, 15 de octubre de 2007a las




¡Feliz día de la nación española! ¡Feliz fiesta nacional!


Herrera y Luzzatti
viernes, 12 de octubre de 2007a las




1982 fue el año de la gran marimorena. Por motivos que a nadie interesan mi mujer y yo nos estuvimos peleando de la mañana a la noche durante meses. Volaba, literalmente, la vajilla. Los pasillos y las escaleras se convirtieron en campos de batalla y el lavabo en trinchera en la que tomar un respiro para volver de nuevo a la carga. Y a ella, un día en el que por lo visto ya habíamos dejado agotado el barriobajero repertorio de la ofensa, le dio por llamarme perro. Con los pies anclados en el suelo, las manos sobre la mesa, la cara roja de ira y el cuerpo inclinado hacia delante me gritó: “gos, gos, tros de gos!”. Y tras un primer instante de pasmo a mí me dio por reír. Reí y reí y reí, hasta el punto en que tuve que tumbarme en el sofá para poder seguir riendo. Y por fin pude abrir los ojos y ver que mi mujer, presa también de la carcajada, se había orinado encima. La firma del armisticio se celebró en el sacrosanto lecho conyugal.



Herrera y Luzzatti
miércoles, 10 de octubre de 2007a las





Mi mujer y yo ya no hacemos el amor. Ni cuando gana el Barça ni cuando pierde el Real Madrid. Y ya ni tan siquiera cuando el Papa visita Barcelona.


Herrera y Luzzatti
martes, 9 de octubre de 2007a las




Recuerdo que era jueves porque la paella me había sentado como un tiro. Poco antes de echar el cierre entró en el negocio un joven a todas luces drogado y con una actitud muy negativa para con el mundo. Manteniendo la calma le dije a mi señora “Dolors, truca als Mossos”. El joven, tambaleándose, se bajó la bragueta, sacó su miembro y balbuceó algo así como “Viejo de mierda, me vas a comer la polla”, al tiempo que se desplomaba, inconsciente, y se orinaba sobre el piso. En vista de que la policía no hacía acto de presencia logramos sacarlo a la calle haciendo palanca con los palos de la escoba y la fregona.



Herrera y Luzzatti
lunes, 8 de octubre de 2007a las




Corrió el rumor por el barrio de que mi mujer estaba liada una temporada con el encargado del supermercado cercano a casa, un pelanas rubio, alto, fuerte y con un nomeolvides de plata en la muñeca izquierda. Pero los rumores son solo eso, rumores. Y la cara de felicidad que ella estuvo luciendo casualmente durante aquella época es fácilmente achacable al aumento del volumen de beneficios que el comercio registró por aquella época. Y punto.


Herrera y Luzzatti
viernes, 5 de octubre de 2007a las




Nos encontrábamos cada tarde en las entrañas embaldosadas que se extienden bajo las calles del Hospital de Sant Pau. Yo fumaba a escondidas los cigarrillos que hacían de mi convalecencia un suplicio más llevadero y él bebía cerveza de un termo de café. Por fin un día me contó su tristísimo caso: Tengo alojada en el cerebro una esfera de aluminio que no para de crecer desde hace cinco meses. La jefa de enfermeras, toda amabilidad, me ha dado una orden tajante: “No se acerque a la sala de televisión los días en que se jueguen los partidos de la Champions, la esfera crea interferencia y distorsiona la señal del TDT. Y no tengo yo el cuerpo para motines futboleros”.



Herrera y Luzzatti
jueves, 4 de octubre de 2007a las




Quisiera tener el recuerdo de mi mujer durmiendo en la pequeña pensión de Peñíscola donde pasamos nuestra breve noche de bodas. El recuerdo de la luna grande como un queso y el de una cortina que se balanceara ante la ventana abierta. El recuerdo de la curva de su cuello que podría seguir a la curva de su hombro. Pero tan solo guardo el recuerdo de su plácida respiración marcando el contrapunto a la pedorreta melodiosa que siempre le ha producido el cava.



Herrera y Luzzatti
miércoles, 3 de octubre de 2007a las




Mi abuelo, dios lo guarde en su gloria bendita, luchó en la guerra del 98. Lo devolvieron de Cuba sin dientes ni pierna derecha, con paludismo, triquinosis y una misérrima paga que gastó en una navaja de afeitar y varias botellas de anís. El delirium tremens que lo acompañó a la tumba estaba plagado de tábanos, mulatas y bocadillos de carne de cerdo con pan con tomate.



Herrera y Luzzatti
martes, 2 de octubre de 2007a las




Mientras el cura parlotea los domingos sobre el bien, el mal, Cristo, los apóstoles, la virgen, las lenguas de fuego, la condenación y el inevitable espíritu emplumado, yo imagino el camino hacia el juicio final como un gran andén sucio y desnudo. Algunas almas cansadas, alcoholizadas en su mayoría, hablan consigo mismo. Unas vomitan en las escaleras y otras compran chocolatinas en las máquinas. No hay música de fondo ni pantallas de plasma que hablen sobre medio ambiente. No hay ansiolíticos para nadie y el tren no acaba de llegar.



Herrera y Luzzatti
lunes, 1 de octubre de 2007a las